Desde 2018, la AFD y el gobierno malgache apoyan a las autoridades forestales y a la Región de Diana para fortalecer la gestión de las áreas protegidas (AP), contribuyendo al mismo tiempo al desarrollo de las comunidades que viven en estas zonas y en sus alrededores. El grupo Oréade-Brèche / APMM / Kinomé proporcionará asistencia técnica durante 5 años en apoyo de la Dirección Regional de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.
En los últimos diez días, se le ha pedido a Yohann Faré que estudie la viabilidad de un mecanismo de apoyo al desarrollo de sectores sostenibles vinculados a las áreas protegidas. Esta dotación financiera permitiría, a partir de 2020 y durante varios años, apoyar a las comunidades organizadas que deseen participar con el sector privado y las ONG en la producción y comercialización de productos respetuosos con el medio ambiente, siempre que puedan demostrar que la mejora de las condiciones de vida reduce efectivamente la presión sobre los recursos naturales de las áreas protegidas. Esto incluiría no sólo la producción agrícola sino también el ecoturismo comunitario o los proyectos de pesca sostenible.
Hay 19 áreas protegidas en la región de Diana, la mayoría de las cuales se encuentran en tierra firme, pero también hay varias áreas marinas protegidas. Kobaby sigue la convincente experiencia del proyecto piloto HaFaFi, también financiado por la AFD e implementado por el GRET, WCS y Fanamby en 3 áreas protegidas de la región. Lo que está en juego en HaFaFi y luego en KOBABY es doble: promover la gobernanza compartida de las áreas protegidas entre las ONG de conservación que han recibido la gestión delegada del Estado y las comunidades locales que son los principales actores locales y cuyo compromiso es esencial para garantizar la integridad de los paisajes.
